miércoles, marzo 21, 2007

¿Líderes o ídolos de barro?

Por la TV Argentina pasan una publicidad de una telefonía celular y el slogan es algo así como : Que la comunicación no incomunique. La escena se desarrolla en un gran parque donde un grupo de nenes chiquitos están divirtiéndose a destajo con un enorme pingüino ( tan de moda, por todos lados). Cantan, se mueven, bailan, hasta que suena un celular y el muchacho disfrazado de pingüino, como no puede hablar bien a través de la máscara, se la saca y se retira hacia un lado para conversar tranquilo de fútbol con el que lo ha llamado dejando cortada abruptamente su animación al grupo. Lo grandioso de esta publicidad se encuentra en la carita de cada nene cuando ven que no era un pingüino REAL el que los divertía sino un muchacho disfrazado de tal. La cosa es que este pingüino, antes de recibir esa llamada, había conseguido comunicarse con la ???fantasía??? de esos nenes y ???sintonizaba??? en la misma onda con este grupo de chiquitos, cantando, saltando, bailando, hasta que ocurrió eso de la llamada telefónica por el celular para producir luego, como efecto, el desencanto y desilusión general. Realmente me pareció espectacular la creatividad del autor de dicha publicidad pues aunque dirigida para un comercial bien podría estar dirigida a la vida real y cotidiana. Cuántas veces nos ilusionamos ante determinados personajes y le creemos, los adoramos, ???son lo más grande que hay???, ??? Es DIOS???, hasta que se sacan la máscara o su imagen se cae, declina, por hacerse vox populis los errores que suelen cometer con sus vidas y acciones. Anda, prueba, levanta una piedra en cualquier parte del mundo y halllarás montones de estos casos??? Nunca olvidaré que siendo estudiante secundario se celebraba en Valparaíso una especie de Olimpíadas Culturales y Deportivas Estudiantiles. Dentro de estas actividades se celebró el Primer Festival de Teatro de Estudiantes Secundarios que se realizó en la Aula Magna de la Univ. Santa María, de Valparaíso. El colegio que ganó el primer lugar, representó una obra de Ionesco, Eugenio, llamado ???El Líder???. Está demás decirles que me marcó para toda la vida la trama de dicha pequeña obra de teatro : es la búsqueda insaciable y constante de un guía o un líder. "Pero del teatro a la realidad sólo nos separa una cortina y un escenario al cual no tenemos acceso pues sólo somos espectadores. Sin embargo, todos los días estamos siendo protagonistas, montados en el escenario real, tangible, interpretando cada uno nuestras vidas." Seguiremos buscando eternamente líderes entre nosotros, seguiremos buscando personas en quienes confiar, en quienes creer, en quienes dejar la carga que a muchos nos pesa, a quienes podamos hacer responsables de nuestros fracasos y logros, a quienes entregar nuestras voluntades para que las administren, a quienes les confiamos hasta nuestras propias vidas. Miremos en derredor, no hay, no existen tales personas y si las hay, por excepción, serán contadas antes de la centena o milenio. Ni hablar si empezamos a contar los ídolos de barro, los que alcanzan la fama con artilugios y que surgen como la mala hierba. Por suerte, éstos gozan de fama efímera, excepto aquellos que sus seguidores o admiradores consiguen ???mitificarlos??? y dejarlos durmiendo en la gloria. En un acto de introspección personal hoy descreo de los farsantes, de los oportunistas, de los falsos ???profetas???, de los ambiciosos de más poder, de los cínicos, de los que ostentan en todo momento un doble mensaje , de los ???agrandados???, de los demagogos y pseudos-políticos, etc., y le doy una oportunidad a aquellas personas sanas, cristalinas, que dejan traslucir que no ocultan intenciones, que se preocupan por sus semejantes y que luchan incansablemente, como héroes desconocidos, por hacer de nuestra sociedad una sociedad más sana, más íntegra, más digna. Con ellos estoy, brindo mi vida por esos sanos ideales. En el mundo espiritual, los creyentes ya tenemos uno y ??Él es nuestro guía (incluso para muchos incrédulos u otros que se las dan de ateos). Y nuestro DIOS no es un IDOLO DE BARRO. DIOS ES AMOR Y PAZ PARA TODOS. Lástima que no pueda gobernar lo terrenal.